Símbolo de gloria y triunfo, el laurel era la hoja, que se utilizaba como motivo en las coronas de los emperadores romanos, los guerreros y atletas muy destacados de la antigua Grecia, desde tiempos remotos. La guirnalda de laurel se consideraba un amuleto que protegía a su portador de todo tipo de fuerzas malignas.
El laurel pertenece a la familia de las lauráceas y puede llegar a alcanzar una altura entre 2 y 8 metros. Sus hojas presentan una forma lanceolada y la tonalidad opaca del lado inferior. Además posee flores que suelen ser de tonos amarillentos o blancos, y un fruto similar a la aceituna.
Dentro de los árboles de su especie, el laurel está emparentado con otros como el canelo, el alcanforero y el aguate. La parte utilizada son las hojas y los frutos.
Uso culinario
Por lo general se utiliza en la cocina, en combinación con otras hierbas como el orégano, el tomillo y el perejil. El laurel es una de las especias que más se utiliza para sazonar, se puede usar para aromatizar carnes, guisos, caldos y distintos platos picantes. No obstante, generalmente se recomienda retirar la hoja de laurel antes de servir el plato.
Propiedades del laurel
Ésta especia, contiene aceites esenciales como el cineol, pineno, linalol, gerianol, sabineno, limoneno, canfeno. Así como taninos, y lípidos; glicéridos de los ácidos laúrico, oleico, palmítico y linoléico.
Gracias a sus características, esta planta está considerada como un poderoso calmante del dolor, como así también antiinflamatorio y antirreumático. Por lo tanto, es muy común utilizarlo para tratar los dolores de ciáticas, torceduras de tobillos, esguinces, en cuyo caso más aconsejado es frotarse la zona afectada con el aceite esencial.
Por otro lado, es excelente digestivo y tiene propiedades diuréticas, eliminando los gases del tracto digestivo. Es por ello que el laurel recomienda para casos de digestión lenta y pesada.
Además, es antiséptico, expectorante, espasmolítico, estimulante del apetito y digestivo. Además es antihemorroidal y útil contra los parásitos.
El aceite de laurel, se utiliza como tónico antiinflamatorio que se puede utilizar para combatir dolores musculares, tortícolis, lumbalgias, ciáticas, e incluso dolores óseos.
Uso cosmético
El laurel suele utilizarse como ingrediente de cremas. Además, se utiliza para evitar y controlar la caída del cabello y los problemas de caspa, una forma de aprovecharlo, es dando masajes sobre el cuero cabelludo con su aceite esencial.
Remedios caseros
Infusión de laurel para la digestión
Ingredientes
1 litro de agua
20 gramos de laurel
Un puñado de frutos maduros de laurel.
Preparación
Coloque las hojas y los frutos maduros en el agua.
Lleve a hervir la preparación durante 10 minutos.
Como aperitivo, toma una taza, 10 minutos antes de cada comida; y como digestivo una taza después.
Contra las reumas
Ingredientes
Un puñado de frutos maduros de laurel
1 litro de agua
Preparación
Tritura los frutos con un mortero
Cúbrelas con el agua y llévalas a hervir durante 10 minutos.
Luego exprímelas con un trapo y dejar que el líquido se enfríe.
Separa la capa de bayas, que se asemeja a la manteca, y aplica en fricciones sobre la zona con dolor.
Para los dolores musculares
Ingredientes
30 gramos de hojas de laurel
1 litro de aceite de oliva.
Preparación
Deja macerar durante días bajo el sol, las hojas de laurel en el aceite.
Luego, cuela la preparación y colócala en un frasco con cierre hermético.
Aplica la preparación sobre la zona adolorida, frotándose con suavidad en un masaje.
Contraindicaciones
El aceite esencial de laurel no debe ser ingerido puro, y mucho menos en caso de embarazo, o lactancia o por niños pequeños. Evítese su consumo, si se padece gastritis, úlceras gastroduodenales, y alergias respiratorias. Su uso externo se considera seguro.
http://www.biomanantial.com/laurel-especie-digestiva-antiinflamatoria-a-2697-es.html