El poder de un simple abrazo
Si alguien nos preguntase para qué sirve abrazar, seguramente contestaríamos que para demostrar afecto, cariño y amor a la persona que recibe el abrazo… Pero hay mucho más.
Abrazar no solo es bonito, es una expresión amorosa y respetuosa hacia las demás personas…, es una necesidad (aunque haya personas que no lo consideran así, no pasa nada, porque debe haber todo tipo de opiniones y puntos de vista).
Pero no debemos olvidar que no en todas las culturas el abrazo está instaurado por igual. En este post hablaré de la importancia de abrazar más, en aquellas culturas en las que sí lo está.
¿Por qué necesitamos los abrazos?
El tener contacto no solo es una sensación agradable, es una necesidad. Un grupo de científicos estadounidenses de la Universidad de Duke apoya la teoría de que el contacto es necesario tanto para nuestro bienestar físico como emocional. Dicho equipo comprobó que el contacto físico es importante para el desarrollo de los niños y el bienestar de los adultos, exponiendo que los abrazos y el contacto físico, no debe disminuir cuando crecemos, sino que debe existir siempre desde el momento de nuestro nacimiento.
Esta investigación demostró que el cerebro de un bebé que no recibía caricias era aproximadamente un 20% más pequeño. La ausencia de contacto físico provoca la muerte de millones de neuronas, además de reducirse el nivel de producción de la hormona del crecimiento.
En el libro "El arte de abrazar", los autores Brainard y Delia Carey cuentan que dos investigadores del departamento de psiquiatría de la Universidad de Carolina del Norte, expusieron que cuando otras personas nos tocan o nos abrazan (a cualquier edad) aumentan nuestros niveles sanguíneos de oxitocina, apodada la "hormona del amor", que es la responsable de crear la sensación de bienestar, y disminuyen la presión arterial y el ritmo cardíaco. Pero también, el abrazo activa en el cerebro la liberación de serotonina y dopamina, por lo que experimentamos una sensación de bienestar, sedación, armonía y plenitud en el momento del abrazo.
En la Universidad de Medicina en Vienna (Austria), revelaron que se debían dar 6 abrazos al día cómo mínimo, a las personas que nos agradan. Con esta cantidad, nuestro organismo puede experimentar una sensación de armonía todo el día.
Razones para abrazar
Según dichos estudios, el abrazo y el contacto físico en general puede:
Hacernos sentir mejor con nosotros mismos y nuestro entorno
Reducir nuestra presión arterial y por tanto tensiones
Aliviar los sentimientos de soledad, de dolor, de depresión y ansiedad
Hacernos surgir sentimientos y pensamientos positivos
Ayudar a superar miedos
Nuestro estado anímico se nivela en su punto más satisfactorio
Mejorar nuestra autoestima
Mejorar algunos casos de insomnio
Fomentar el altruismo
Reducir/retrasar el envejecimiento (las personas que abrazan se mantienen jóvenes por mas tiempo)
Mejorar nuestra memoria
Ratificar nuestra concepción de pertenencia
Es una fuente de energía: transmitimos y recibimos energía
"Pasear de la mano de nuestra pareja durante diez minutos o, un breve abrazo, pueden tener un efecto protector sobre el corazón al comenzar una dura jornada laboral” Karen Grewen
Aparte, también nos brinda: Amplitud de Comunicación. Un abrazo nos permite comunicarnos o “conversar” con otra persona, y también con nuestras emociones internas; Protección y Seguridad; Confianza; Fortaleza; (Auto) valoración: Transmitimos reconocimiento y Salud: El contacto físico y el abrazo imparten una energía vital capaz de mejorar la sanar o aliviar.
Pero hay que tener presente que la oxitocina sólo se libera si abrazamos a alguien que nos agrade, que realmente estimemos o amemos. Por el contrario, si el contacto se produce con personas que nos desagradan, y por las cuales no sentimos ningún tipo de afecto, nuestro cuerpo reacciona con los síntomas contrarios:
Desequilibrio en el organismo
Aumentan los niveles de estrés y ansiedad
La presión arterial también aumenta
Experimentamos incomodidad
Nuestro estado anímico se merma
¿Cuántas personas abrazas al día, que sean de tu agrado?
Los abrazos son fáciles de dar (aparentemente), sólo se necesita TENER APRECIO, desear darlo, y sentir, pero tiene un coste…, requiere que nos abramos, y este simple gesto nos puede hacer sentir vulnerables. No todos estamos acostumbrados al mismo nivel expresividad y recepción del afecto. Y abrazar es un gesto muy demostrativo.
Hay personas que les cuesta más aceptar que otra le abrace (generalizando y sin entrar en tipología de abrazos y/o sentimientos), y les hace sentir incómodos, por el simple hecho de ser rodeados físicamente; a otras, les cuesta mostrar sus emociones, e incluso hay personas que tienen muy en cuenta (consciente o inconscientemente) la interpretación que pueda dar la otra persona. Pero como suelo decir…todo es cuestión de práctica y dependerá del momento y la forma.
El ser humano necesita el contacto con los demás para sentirnos bien y el cariño expresado a través del abrazo es clave para alcanzar la sensación de bienestar.
Cuando nos abrazamos, llevamos “vida” a nuestros sentidos y reafirmamos la confianza en nuestros propios sentimientos.
Algunas veces no encontramos las palabras adecuadas para expresar lo que sentimos y el abrazo es la mejor forma de hacerlo.
Estamos empezando a comprender el poder que tiene abrazar a otra persona. Así que, ya conociendo un poco más de la importancia de abrazar a tus seres queridos (amigos/as, familiares, mascotas...), y de dejar de abrazar a quienes te disgustan o incomodan…, es momento de que consideres un hábito diario, dar como mínimo 6 abrazos al día, y así contribuir con el bienestar de tu cuerpo, tu salud (física y emocional) y el de otras personas.
Recuerda, dar un abrazo es un gesto de apoyo, de compañía, de cariño y de ánimo que, con muy poco, puede lograr mucho. Disfrútalo y, sobre todo, devuélvelo.
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por gerundio Ayer a las 17:45
