¡Sabes! muchos de mis secretos te los he contado a ti, no te conocía, pero…me pedias que confiara en ti y así pasaban los días y mis palabras más te buscaban, un día te pregunté ¿te das cuenta como confió en ti? tu respuesta fue clara, ¡sigue confiando en mí!
Con el alba me llamabas y yo corría hacía ti en un viaje de ensueño como metida en un cuento dos personas se iban conociendo, dos corazones que suspiraban, dos almas que se entrecortaban, se iba el alba y nuestras miradas tan profundas hablaban, yo triste me quedaba, el viaje de ensueño terminaba, al atardecer cuando el sol en el horizonte guiñaba aparecía un ángel con cola blanca y los rallos del sol atrapaba, como un ramo de flores era aquel ramillete de rayos de sol que yo lanzaba a las estrellas se lo regalaba, quería estar con él en la oscuridad le seguía contando mis secretos que con atención él me escuchaba la magia de la noche hizo que también él confiara, secretos de su vida me contó, algo nació entre los dos el firmamento fue testigo de lo que allí pasó, rodeados de estrellas y la luna sonriendo de ver tanto amor como allí nació.
Planificaste un encuentro que no se realizó te enfadaste y toda la magia desapareció, encuentros esporádicos tenemos pero yo siento que aquello que nació fue un gran amor, no sabes cómo espero otro viaje de ensueño y contarte el mejor de los secretos como es nuestro AMOR.
Autor: Gracia