La fe mueve montañas a su vez moviliza a los vivos de ocasión.
La soberbia es la herramienta perfecta con la cual cavamos nuestras propias tumbas.
Siempre encontraremos un claro al final del camino, solo debemos tener bien afiladas las esperanzas, así poder cortar la maleza que crece día a día frente a nosotros, sin dejarnos ver la realidad que nos merecemos… Que así sea es mi mayor deseo.
El respeto ante todo sin respeto no existe el amor.
Todo aquel que reconoce sus errores y trata de remediarlos conocerá la paz interior del alma.
Si en algún momento de tu vida te robaron el amor no permitas que te roben la esperanza.
Vive la vida justifica tus errores no vivas con errores justificando a la vida.
Aunque tengamos días nublados nunca perdamos las esperanzas de poder recibir las suaves caricias del sol.
Autor: Jorge Ducoli