Existen dos razas de gigantes sin relación alguna, cuya principal característica es tener un sólo ojo en medio de la frente, conocidos con el nombre de Cíclopes y que generalmente se dedicaban a la herrería. El término cíclope se deriva de griego Κύκλωπες= κύκλος, rueda y ὤψ, ojo.
La raza original de cíclopes, hijos de Urano (el cielo) y Gaia o Gea (la tierra), eran Brontes, Esteropes y Arges, llamados también “El que truena” (trueno), “El que da el rayo”(rayo) y “El que brilla”(relámpago). Según la leyenda, estos tres cíclopes fueron los responsables de fabricar el rayo y el trueno para que Zeus luchara contra los gigantes y titanes en la guerra conocida como Titanomaquia; también estuvieron al servicio de Hefesto y se encargaron de fabricar más armas para el uso de los dioses y héroes, por ejemplo: el tridente para Poseidón, el arco y las flechas para Artemisa y el casco que Hades usaba para hacerse invisible, entre otros. Los hijos de estos tres primeros cíclopes son: Eurialo, Elatreo, Traquio y Halimedes.
La segunda raza de cíclopes proviene de los poemas de Homero y según estos, los cíclopes eran gigantes salvajes y antropófagos que vivían en una isla siempre alejados de todo lo que estuviera relacionado con los humanos. Según los poemas de Homero, esta segunda raza de cíclopes estaba fuertemente relacionada con los Gigantes y los Phaiakai. El más famoso de todos ellos fue Polifemo, hijo de Posidón y Toosa, quien en una de las visitas de Odiseo se come a dos de sus colegas y en venganza ciega a Polifemo.
Otro cíclope famoso es Balor, rey de los Fomorianos quien, al igual que los tres cíclopes de la raza original, tenía una mirada que fulminaba todo lo que viera; este último cíclope tuvo un nieto de nombre Lugh quien lo venció en una lucha feroz.