La mezcla de amor y rechazo puede causar gran confusión y dolor. Normalmente, hace que el devenir de la relación −para bien o para mal− sea bastante complicado. Por un lado, es posible que las personas sigan amándose −aunque el amor tenga tintes de egoísmo y dependencia−. Por otra parte, el resentimiento generado a causa de la sensación de pérdida de libertad produce malestar, aversión y hasta odio hacia el otro.
Hay veces en la vida en que tenemos muchísimas preguntas para todo, sobre todo cuando nos ocurre algo, pero las respuestas nunca llegan cuando las deseamos, sino que llegan cuando menos las esperamos. Así, Aunque el amor puede surgir a primera vista, lo más común es que dicho proceso lleve un tiempo. A primera vista puede haber atracción, interés, e incluso la intuición de que la otra persona es ese ser especial que se busca.
Sin embargo, de la atracción se llega al enamoramiento y del enamoramiento puede alcanzarse el amor. Y hay quien dice que del amor al odio hay un paso.
Básicamente, Amor- Odio son un binomio que tiene muchos nombres. Son un par de fuerzas en equilibrio, en el actual período de evolución humana.
Al comienzo, una situación ofrece las siguientes alternativas: .Indiferencia o Interés. De esta manera, la relación entre los seres presenta: atracción o rechazo que en sus expresiones máximas son Amor u Odio.
La persona amada se convierte en la persona odiada por cuestiones de frustración-agresión −o de una baja tolerancia a la frustración−. Se pone a alguien en un pedestal −quizás sin que la otra persona no lo merezca− y luego decide desecharlo como una pañuelo descartable . Pasado el periodo de cristalización se descubre que el enamorado no cuenta con todas las cualidades proyectadas. Esto puede causar mucha frustración.
También, puede ocurrir que las expectativas no cumplidas lleven a una animadversión debido a la frustración que generan. De manera que lo que antes se aceptaba sin mayor esfuerzo ahora es denegado inflexiblemente... Lo que antes se deseaba ahora se detesta.
¿Cual será la naturaleza del amor?. Nadie sabe cual podrá ser la materia que alimenta este sentimiento. A lo mejor, es que nos estamos equivocando y el amor no necesita ninguna materia para ser alimentado. Puede ser que nos equivoquemos al intentar descifrar su naturaleza. Cualquier científico empírico diría lo contrario.
En fin, Amor-Odio: yin- yang, negro-blanco, el agua y el aceite; todas estas relaciones son idénticas al amor-odio, excepto en algunos casos el yin -yang, que en momentos joviales podría pasar a ser un yin con yin.
Las relaciones Amor-Odio, cuando comienzan con odio pueden terminan en amor y cuando comienzan con amor, pueden terminar en odio. Siempre se puede estar a punto de romper la soga que separa el amor del odio.
Al final de cuentas como dice Oscar Wilde “uno mata lo que ama”.
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