Los celos son un fenómeno universal que se encuentran presentes tanto en animales como en seres humanos, y dentro de éstos últimos, igualmente tienen lugar dentro de diferentes grupos de edades, culturas o sexos.
Se trata de un proceso complejo, en el cual se da una mezcla entre el temor y el miedo a perder a una persona, y el amor y cariño hacia la misma. Hay por tanto una mezcla de emociones. Además de estas emociones, los celos implican que la persona que los experimenta posea unos sentimientos de exclusividad con respecto a la otra persona, así como unos sentimientos de inseguridad con respecto a sí mismo.
Se trata de algo subjetivo ya que, lo que para una persona en concreto puede provocar celos, en otra no tiene por qué hacerlo y viceversa; dependen por tanto de la interpretación que cada individuo realice de la conducta del otro.
Pero ¿son los celos un problema en una relación de pareja?
Para poder contestar esta pregunta de forma adecuada, sería necesario disponer y tener en cuenta ciertos parámetros que pudiesen ofrecer información sobre la frecuencia, intensidad o duración de esos celos. En pequeñas dosis y de forma aislada, los celos pueden resultar saludables y adaptativos, pero cuando los tres parámetros son muy elevados, dentro de la pareja y estos episodios interfieren en la vida conyugal de forma significativa, se podría hablar de celos patológicos, que puede llegar incluso a romper la relación.
Algunos indicadores que pueden ser útiles a la hora de comprobar si los celos se están convirtiendo en un problema que desgaste y destruya la pareja, son:
- Constante necesidad de controlar a la pareja y sus movimientos.
- Habitual desconfianza en aquello que dice y hace la pareja.
- Desagrado de los amigos de la pareja.
- Frecuentes reproches a la pareja por su comportamiento, por su forma de vestir, etc.
- Sentimientos habituales y muy presentes de exclusividad con respecto a la pareja.
Cuando estos indicadores se encuentran presentes de forma habitual en la pareja haciendo que ésta se resienta, a menudo es complicado llegar a una solución sin ningún tipo de ayuda externa. En estos casos es más indicado acudir a terapia con el fin de poder superar y solucionar dichas situaciones y episodios, dotando de seguridad y confianza tanto al miembro celoso como a la pareja en su conjunto.
http://terapiaparejamadrid.com/