Mi pareja Me ha dejado!

Qué duro es cuando nuestra pareja, alguien por quien sentimos aún amor y en quien hemos depositado todas nuestras ilusiones y expectativas, un día nos dice “tenemos que hablar”. Sabemos que después de esto viene una disculpa y, en el mejor de los casos, un distanciamiento, aunque generalmente significa ruptura por desamor. Nuestro corazón se acelera, sentimos que nos falta el aire y nuestra carga emocional y conexiones neuronales van a tal velocidad que hasta se nos hace difícil pensar. Tan solo nos viene a la cabeza ¿Por qué? ¿Qué he hecho mal? ¿No soy suficiente para él/ella? ¿Qué voy a hacer ahora? Un sinfín de cuestiones negativas limitantes que se apoderan de nuestra mente, y que lo único que consigue es que el miedo de apodere de nosotros y nuestra autoestima caiga empicada.

Posiblemente ya te habías planteado hacía tiempo en algún momento que no era la persona adecuada para compartir tu vida pero la cuestión es que hemos sido rechazados, nos han dejado, han considerado que no estamos a la altura. Y es que no es tanto el pensar que no vamos a estar con alguien por quién, posiblemente, aún palpita nuestro corazón, que también es importante, pero quizás lo sea aún más el hecho de que nuestro valor como persona, como pareja, ha sido cuestionado y ello significa que hemos dejado de generar interés sentimental

La mayor parte de nosotros conocemos a alguien que ha vivido tan angustiante situación o lo hemos sufrido en nuestras propias carnes y sabemos que es una etapa en la que hemos de estar muy atentos de no dejarnos llevar por la situación pues, en caso contrario, es posible que entremos en un círculo de preguntas negativas que nos lleven al victimismo en el que, según va pasando el tiempo, nuestra autoestima cada vez se ve más y más deteriorada e irá erosionando el resto de las áreas de nuestra vida, por no hablar de lo difícil que nos resultará recuperarla.

Ante esta realidad, todas las personas que se enfrentan a esta situación necesitan una dosis extra de reconocimiento, valoración y admiración. Por ello podríamos decir que lo que, para equilibrar esa amenaza contra su auto estima, precisan sentirse:

1- Atractivos

2- Comprendidos

3- Admirados y valorados

4- Que pueden hacer que una relación sentimental funcione

5- Que no tienen porqué estar solos

6- Que una ruptura sentimental es una situación temporal hasta volver a mantener otra relación.

7- Que no fueron los culpables de dicha ruptura

Con todas o algunas de estas necesidades en mente, la persona que acaba de ser abandonada, busca apoyo o consuelo en amigos, o personas que considera que puede ayudarle a recuperarse de este trance.

En muchos casos, pueden encontrarse tan sensibles y necesiten tanto apoyo y cariño que no será extraño que, en poco tiempo, vayan buscando inconscientemente o vean a otra persona como un posible sustituto al amor que se acaba de marchar de su vida. Y la verdad sea dicha, una de las cosas que más puede perjudicar a una persona que acaba de finalizar una relación sentimental es iniciar otra relación sentimental, especialmente si es puramente sexual. En este último caso, las expectativas no se verían satisfechas puesto que las demandas serían de cariño y ternura cuando sólo obtendría, en el mejor de los casos, este tipo de atenciones de forma temporal y ligadas a un interés sexual, con lo que la sensación posterior puede ser mucho peor.

El modo en el que superamos una ruptura sentimental de estas características, es muy personal y no puede establecerse ninguna generalidad. Me estoy refiriendo al tiempo que se puede tardar en salir de estos duros momentos y las dificultades que pueden encontrarse para hacerlo. Una persona puede tardar una semana en pasar por el duelo hasta la aceptación de la nueva realidad y seguir adelante, y otras personas podrían estar meses e incluso años en el proceso.

Lo que debes saber es que es normal que pases por una situación de duelo inicial en el que el vacío y la pena se apoderen de ti, pero no es más que eso, una etapa temporal de adaptación a la nueva situación de separación de tu vida de alguien que hasta ahora formaba parte de ella.

Eso sí, no te aferres a ella por el cariño y apoyo que puedan darte las personas de tu entorno por ver que estás sufriendo pues esto tan solo podría llevarte a una vida de victimismo y conformismo que te impediría salir de este ciclo.

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