No es tu esfuerzo
Lo que te hace ser hombre,
No son tus propósitos ni tus conocimientos
Ni tu actividad,
Tampoco tu aspecto físico
Tu fuerza, tus músculos
Tus palabras duras,
O tus gestos duros y agresivos,
Eres hombre en la medida que creces
Junto a otros
Que trabajas con otros
Si ves a otros y te comprometes con los otros.
Eres hombre,
Cuando eres dueño de ti mismo,
Y sabes a quien puedes entregar la vida,
Eres hombre en la medida que tu lucha
Para que otros hombres puedan serlo,
Para que vivan y trabajen dignamente,
Para que se les reconozca y respete
Sus derechos,
Para que oren, amen y crezcan
Como hombres libres.
Nunca serás feliz sin los demás
No podrás vivir plenamente
Si al pronunciar el ¡yo!
No hay un ¡tu! que lo recibe
O un ¡nosotros! que lo celebra.