Rumores recorren mi cabeza. Rumores que pronuncian tu nombre, en susurros.
Rumores que saben que en cualquier momento serán silenciados por una mentira. Silenciados, mas no apagados.
A tu nombre le gusta recorrer a escondidas mi cabeza, y de vez en cuando le encanta correr desnudo por mi imaginación, dejándola con ganas de algo mas que solo recuerdos.
Tu maldito nombre, que está envenenando mi cabeza conforme los suspiros se me van terminando.
Cuando de pronto se le vuelve muy divertido transformarse de letras a imágenes, muy similares a…. Tus ojos. Esos, que me azotan el corazón y me atrapan como la luz a un insecto. Eso soy frente a ti, un insecto atontado por la luz de unos ojos que no he conseguido apagar. Los odio también.
Todo tu generas ese efecto que me hace agonizar por milésimas de segundo.
Dudo soportar mucho este estado tan cerca….. mientras tu estás tan lejos.