¿Y si los números tienen un profundo significado?
"El azar no existe. Hemos inventado esta palabra para designar el efecto desconocido de una causa desconocida". Voltaire.
Durante miles de años, los números han fascinado a la humanidad con su sabiduría tan profunda, y a pesar de que a lo largo del tiempo muchos documentos se han perdido, los manuscritos y fragmentos que han sido hallados en Egipto, China y la India nos permiten de cierta manera acercarnos a las mentes de los primeros matemáticos que existieron. La mayoría de nosotros sabemos que los Árabes crearon el sistema numérico utilizado por nosotros en la actualidad "números arábigos" introducido por ello a Europa, aunque comprendiendo que su invención surgió en India, debiendole entonces a la cultura india la invención del sistema de numeración de base 10, pudiéndose encontrar evidencia por ejemplo en los textos sagrados hindúes en donde "los Veda" y "los Upanashad" explican que los Árabes basaron sus conocimientos en los propios hindúes quienes a su vez supuestamente adquirieron dicho conocimiento de los dioses.
Se cree entonces que existe una relación entre los números, los seres vivos, los astros, y las fuerzas físicas y espirituales dando a entender que cada número contiene en si un significado simbólico que permite a través de su correcta interpretación el descodificar y descifrar la vibración actuante ya sea sobre una persona, evento u objeto. Transformándosen de esta forma el uso de los números en algo de carácter universal, superando las barreras sean de raza, clase o idioma. Podemos ver esta correlación o interrelación en los planteamientos chinos por ejemplo, que influenciados por los viajeros fenicios atribuyeron las cualidades del fuego, el sol , el día, el calor y el color blanco a los números impares mientras que a los pares les correspondian las cualidades contrarias, es decir el frió, la luna, el agua, el negro y la noche, e inclusive entendiendo que tanto los antiguos matemáticos como los modernos teóricos del átomo reducen nuestro universo a números.
En el año 530 a.C (antes de nuestra era)., Pitágoras, desarrolló en forma metódica una relación entre los planetas y su “vibración numérica”. Le denomino “la música de las esferas”. Mediante su método de numerología descubrió que las palabras tienen un sonido que vibra en consonancia con la frecuencia de los números como una faceta más de la armonía del universo y las leyes de la naturaleza. Se dice que Pitágoras de Samos creador de la secta filosófico-religiosa basada en el orfismo, en la que los miembros vivían en comunidad de bienes, participando de un conjunto de creencias y saberes que permanecían en secreto para los No iniciados, es el Padre de las matemáticas, pero de esta misma manera es el de la numerología, incorporando estos atribuciones al sistema que ideó en el siglo VI a.C, Pitágoras mantenía la idea de que el movimiento de los planetas, el ciclo de las estaciones y las acciones de la humanidad podrían llegar a codificarse y de esta forma convertirse en leyes matemáticas. De esta manera según Potágoras todo puede reducirse a términos matemáticos, defendiendo el un sistema de opuestos estableciendo en la escuela de Crotona, Italia las reglas fundamentales tanto de las matemáticas como de la numerología, y muchas de dichas reglas siguen siendo validas en la actualidad.
Por otra parte el pueblo Hebreo desarrollo un método un tanto diferente basado en la costumbre ancestral de traducir las letras a números, aunque quizás por el secretismo o por otros factores al este sistema estar relacionado con la Kabbalah gran parte de su sabiduría se ha perdido a lo largo de la historia. Aunque en la actualidad podemos encontrar el sistema denominado "Gematria" que emplea las 22 letras del alfabeto hebreo entendiéndose que cada letra posee una serie de "niveles" de interpretación que se deducen a partir de los libros del Antiguo Testamento, siendo la gematria un aspecto de la cábala dedicado a la investigación de unas supuestas relaciones entre las palabras del mismo valor numérico.
La numerología en la actualidad podría definirse cortamente como una ciencia y herramienta matemática que se basa en la fecha de nacimiento, el nombre y la firma para que de esta forma sea posible realizar un perfil de la personalidad que le muestre al interesado cual es su potencial, que los frena y cual es el mejor camino de acción logrando de esta forma obtener una orientación hacia que camino seguir, dándose a entender que a diferencia de lo que muchas personas piensan la tentativa de reducir la personalidad de una persona a unos números no es un acto frío ni calculador que no tiene idea las ideas espirituales de la persona, siendo esto un concepto erróneo gracias a que los números son representaciones fundamentales de toda la gama de elementos que componen el universo.
Descubriendo mi número personal.
Este número se calcula a partir de la reducción de la fecha de nacimiento, es decir se suma el día, el mes y el año completo del nacimiento de la persona hasta reducirlo a un solo dígito, de esta forma por ejemplo si una persona nació el 11 de septiembre de 1954, sumamos el 1 + 1 (día) + 9 (mes) y 1+9+5+4 (año), dando por resultado un 30 que simplificado (3+0) dará un 3 siendo este el número personal.
Sabiendo esto de seguro querrás saber que significa cada número, así que aquí podrás encontrar que te dice tu número en palabras claves (algo corto y sustancioso), con el planeta y el signo al que se relaciona.
El número 1:
Asociado al sol y al signo de Leo, la creatividad, la esencia, el movimiento, la voluntad, lo autentico, iniciadores, lideres, llenos de valores y autoridad.
El número 2:
Asociado a la luna y al signo de Cáncer, cooperadores, la dualidad "equilibrada", los sentimientos y emociones, en ocasiones la "irracionalidad", sentido para la familia, en busca de tranquilidad, pasado.
El número 3:
Asociado a júpiter y a los signos de Sagitario y Piscis, la variedad, el movimiento y la comunicación, las funciones sociales, la conversación y el gusto por la compañía.
El número 4:
Asociado al sol y al signo de Leo el equilibrio, la productividad, la participación, la persistencia, el trabajo, la ayuda hacia los conocidos.
El número 5:
Asociado a mercurio y a los signos de Géminis y Virgo, la adaptabilidad a os cambios, ingeniosidad, inteligencia, seguridad, grandes sentimientos, trabajo.
El número 6:
Asociado a venus y a los signos de Tauro y Libra, la generosidad, el perfeccionismo, la familia, el amor, la lealtad, la conservación, la responsabilidad (ojo con la rutina).
El número 7:
Asociado a la luna y al signo de Cáncer, la ley y las reglas que ordenan el Cosmos, la espiritualidad, el conocimiento, la ciencia, la magia, auto-confianza, la imaginación, los visionarios, la exageración.
El número 8:
Asociado a saturno y a los signos de Capricornio y Acuario, el poder de la palabra, el control, la organización, la justicia (causa y efecto), la ambición, la posición dentro de la sociedad.
El número 9:
Asociado a marte y al signo de Aries y Escorpio, la sabiduría, la espiritualidad, la conciencia, la experiencia, la cooperación, la soledad y la responsabilidad.
También puedes tener en cuenta las siguientes pautas, para obtener un poco más de información.
1, 2 y 3: Representan la unidad, es decir el "Yo".
4, 5 y 6: La multiplicidad, el "Tu".
7, 8 y 9: La totalidad, el "Ello".
- El este (aire), la mente, la cabeza lo rigen los números 1 y 8.
- El oeste (agua) las emociones y los sentimientos lo rigen los números 2, 3 y 6.
- El norte (tierra) la belleza, el trabajo y el dinero lo rigen los números 4 y 5.
- El sur (fuego) la intuición, lo espiritual, la magia y la introversión lo rigen los números 7 y 9.
¿Que tiene que ver el año que empieza?
El año 2012 es un año número 5 (2+0+1+2= 5) un tiempo de cambios y oportunidades que se deben aprovechar, quizás algo tenso y acelerado sabiendo aceptar y adaptarnos a los cambios, muchos movimientos habrán. Esta información es útil para saber en que año nos encontramos cada uno, y esto se hace sumando el dígito individual con el dígito universal es decir que si por ejemplo una persona es un número 4 se le suma 5 y da 9 siendo este el año que esta viviendo.
Así que .. 1,2,3 ...
Año uno: Nuevos capítulos en nuestra vida.
Podremos emprender nuevas cosas, tendremos un aire de independencia e innovación. Es el año perfecto para independizarnos si así lo queremos, pero de no ser así es el año perfecto para convertirnos en lideres (en especial de nuestras vidas).
Año dos: La intuición sube.
El amor se convierte en una prioridad, tal vez formar una relación más estable y trabajar en equipo. Esas "corazonadas" se desarrollaran cada vez más. Es un buen año para las sociedades.
Año tres: ¿Te acuerdas de tu vida social?
Es un año lleno de creatividad, comunicación en donde el optimismo reinara. Indudablemente podremos aumentar el circulo de nuestras amistades (sabiendo escoger), esto se debe a la facilidad de interactuar.
Año cuatro: Dinero y amor.
En lo material es un tiempo de reconstruir, de trabajar, de volvernos ordenados y proyectarnos trabajando arduamente para poder ver luego los resultados, pero ve siempre con calma.
Año cinco: ¿Y si cambiamos algunas cosas?
A viajar se ha dicho. Si has esperado para realizar cambios (de hogar, de país, de trabajo) es el momento propicio abriendo los brazos a las oportunidades que se vienen.
Año seis: ¿Boda quizás?
Es un año hermoso para unirnos con nuestra pareja, y construir un exitoso hogar. La capacidad de amar y amarte aumenta (al igual que el instinto maternal), la familia sera central en este año, inclusive la compra de vivienda.
Año siete: Meditando ... ando.. Om.
Año para conectarnos con nuestro "Yo interior", así que a lo mejor quieras alejarte de las multitudes y escucharte a ti mismo/a esta vez, quizás iniciar nuevos estudios, la concentración sera una virtud de este año.
Año ocho: Sembraste? .. ahora cosecha los frutos.
Se llegan las recompensas económicas con el ocho. Es un buen momento para invertir ya que es probable que los ingresos aumenten, ascensos e inclusive ofertas laborales podrían venir. Aprovecha este periodo y logra la estabilidad.
Año nueve: Cierra la ventana, la puerta y tus ciclos.
Es un año para sanarnos, con esto me refiero a sacar fuera lo que ya no nos sirve (y no hablo solo de lo material) ¡desintoxicate!, para que de esta forma lleguen cosas nuevas el próximo año.
Tal vez (y tal como lo pienso) la numerología no predice, sino que marca una energía vibracional que funciona como las estaciones (tal como nuestros Sabbats) con los momentos de invierno, de primavera ... otoño y verano, con la cual debemos armonizarnos para lograr obtener todos sus beneficios y mejorar nuestra calidad de vida.
Los años 1, 2 y 3 son considerados años de primavera. En el año 1 la persona recibe el terreno en el cual comenzar a sembrar; en el año dos lo que sembró comienza a germinar para luego florecer en el 3, son años de "relax", las complicaciones quedan fuera. Luego de la primavera llega el verano y a esta estación corresponden los años 4, 5 y 6. Con el año 4 comenzamos a trabajar (mucho), el año 5 (el verano intenso) es el año de cambiar y de captar y aprovechar oportunidades mientras que ya el año 6 finaliza los tiempos de verano en donde buscamos el "brazo del hogar" para equilibrarnos, estar con la familia y volvernos más responsables. El otoño llega de la mano del número 7 con éxito y reconocimientos, es cuando comenzamos a recoger lo que se sembró (el efecto de la causa), aunque puede llegar a ser algo melancólico este año, por su parte el año número 8 es un año limite entre el otoño y el invierno en donde se recoge por completo la cosecha, si es que se sembró por que es un año de recompensa o de castigo dependiendo de que "tan bien nos portamos" en los años anteriores y para finalizar el número 9 es el frío invierno en donde descansamos, se reservan energías y nos preparamos para comenzar nuevamente el próximo año.
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