¡Sana tu Vida HOY Mismo!

La vida es una reacción en cadena, si no cuidamos nuestras creencias y sentimientos, ellos nos hacen actuar, y casi siempre inconscientemente. Las creencias crean hábitos –acciones que hacemos automáticamente- y los sentimientos se convierten en emociones, las cuales son muy poderosas y nos hacen actuar. Por eso es muy importante estar al pendiente de nuestras creencia y emociones, y la única forma de hacerlo es estando PRESENTE en nuestra vida, mejorar la conexión con nuestro ser, nuestro espíritu interno. Hay mucha gente que pasa su vida siendo una víctima, por lo que atraen a la gente que abusa de ellos de diferentes formas. Son la “pareja” perfecta para los abusadores. La vida es una reacción en cadena y si no nos sanamos de las experiencias dolorosas continuamos la cadena con más eventos dañinos. Las personas que dañan o abusan de otros también se lastiman a ellos mismos, pero su “ego” y los programas grabados en su subconsciente no les permiten reconocerlo. Creo que, casi siempre, están tratando de pedir amor y aceptación, pero desafortunadamente la única forma que ellos conocen para “satisfacer” sus necesidades es lastimando a las personas. La mayoría de las víctimas no hablan sobre su situación y sus sentimientos porque se sienten culpables del abuso. Por eso no piden ayuda, no saben cómo sanarse ellos mismos, así que continúan llenando la bolsa hasta que la bolsa está llena y explota; llena de emociones poderosas (resentimientos, miedos y odio) que se manifiestan al mismo tiempo. Estas victimas pierden la consciencia y cometen accione horribles. El abusador (y los demás) piensan que como normalmente una víctima es tímida y callada, nunca reaccionaran, pero normalmente las víctimas reaccionan de una forma inesperada. Todos nosotros, como sociedad, somos responsables de las historias que ocurren a nuestro alrededor, y la única forma de cambiar las historias horribles por historias felices es tomando la responsabilidad de sanar nuestra vida y VIVIR lo mejor que podamos. Y la medicina universal es el amor incondicional, amarnos a nosotros y a los demás. El amor está dentro de nosotros, dentro de TI y de MI, y somos capaces de crear amor dentro de nosotros y a nuestro alrededor, solo necesitamos conectarnos con nuestro ser interno. Si has tenido malas experiencias en tu vida, tú eres el único que puede sanar tu vida a través del amor incondicional. He aquí un ejercicio para sanar tu vida: Respira y recuerda tu infancia: Encuentra un lugar tranquilo y siéntate en una posición cómoda. Respira lenta y profundamente unas cuantas veces. Trata de recordar cuando eras niño; ¿Qué te decían tus papás? ¿Cómo te trataban? ¿Alguien abusó de ti física o emocionalmente? A veces el factor crítico (la división entre el consciente y el subconsciente) trata de protegerte del sufrimiento y no te permite llegar a esos recuerdos. Es necesario hacer este ejercicio unas cuantas veces (diferentes días) para empezar a recordar. Es importante recordar lo que te lastima para poder sanarte. Perdónate a ti mismo y a los demás. Si encuentras recuerdos (sentimientos) que te lastimen, es de tiempo de perdonarte a ti mismo y a los demás involucrados. Para llenar tu vida con amor incondicional, necesitas soltar los sentimientos y recuerdos negativos. Tú eres un hermoso ser humano y mereces solo cosas buenas, así que es tiempo de romper la cadena y empezar a sanar tu vida. Puedes usar tus afirmaciones positivas: ¡Yo me perdono y perdono a los demás! ¡Yo doy permiso a mis resentimientos de salir de mi vida y lleno mi vida con amor! ¡Yo estoy en paz! ¡Yo soy libre y estoy abierto a recibir cosas hermosas en mi vida! Llena tu vida con amor incondicional. Mientras sigues respirando, visualiza una luz blanca saliendo de tu corazón y llenando todo tu cuerpo de esa luz. Esta luz brillante está esparciendo amor a cada parte de tu cuerpo. Visualiza tu cuerpo completo cubierto de luz y recibiendo amor; tu cuerpo y tu alma están siendo sanados con amor incondicional. El amor incondicional es tu fuente, tú eres amor. Siente la conexión con tu ser y la energía poderosa que está sanando tus recuerdos. Es una buena idea repetir tus afirmaciones positivas: “Yo soy amor; Yo soy energía; Yo soy paz; Yo soy felicidad; Yo soy salud; Yo me siento de maravilla…” y cualquier otra afirmación que te haga sentir bien. Recuerda que todo es cuestión de práctica y si tienes de 10 a 15 minutos diarios para estar presente en tu vida y sanar tus recuerdos (creencias y sentimientos) que están limitando tu felicidad, romperás la cadena de víctima y empezarás a crear la vida que te mereces. El mundo está esperando por tu felicidad, ¡deja de ser una víctima ahora! Tú eres el único que puede cambiar tu vida.

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