La imagen mental positiva de ti mismo
realizará el prodigio de alcanzar
logros sorprendentes.
Retírate, cada noche, a visualizarte,
durante media hora, realizando
maravillosamente un propósito concreto.
Graba en tu mente
un vivo retrato triunfante de ti mismo.
Mantén tenazmente ese retrato
en tu imaginación.
Si persistes en este ejercicio
durante veintiún días,
te sorprenderás del resultado positivo.
Imagina que eres capaz y créelo,
pues de tu seguridad depende tu éxito.
Las imágenes son más impactantes
que las sugestiones verbales.
Tiberio López Fernández