El amor es la fuerza más poderosa en el Universo. El enviar amor a una situación o persona difícil a menudo crea resultados maravillosos e inmediatos. El amor puede traer armonía y éxito a tu vida y a las vidas de los demás. Recuérdalo siempre, sobre todo cuando te encuentres en una situación difícil.
El enviar amor a los demás es una manera de sanar tu propia frecuencia energética. El amor crea una vibración magnética maravillosa, que se expande hacia los demás, resultando en cambios significativos en tu vida.
Cuando tengas un problema, mándale amor. Respira profundamente, piensa en la situación o persona involucrada, y repite la palabra “amor”. Hazlo frecuentemente y ¡verás los resultados!
Cuando te encuentres con un extraño, sonríele y piensa la palabra “amor”. Manda amor a todas las personas con las que interactúes cada día. Siente la energía de esta emoción en tu propio cuerpo.
Mándate amor a tí mismo(a). Cuando estés en la cama, ya sea acabando de despertar por la mañana, o a punto de dormirte por la noche, repite la frase “me amo a mí mismo(a)” una y otra vez.
La importancia del amor a uno(a) mismo(a) no puede ser ignorada. Si hasta ahora no te has demostrado amor a tí mismo(a), cambia esta actitud y haz la intención consciente y prioritaria en tu vida de amarte a tí mismo(a) de ahora en adelante. No importa lo que te hayan enseñado a creer, tú eres una persona valiosa y digna de ser amada. Debes aceptar esa verdad a partir de ahora y comenzar a darte a tí mismo(a) toda la amabilidad, consideración y apoyo que deseas de los demás. Si no estás seguro(a) de como hacerlo, comienza con dejar de criticarte. Cuando notes que lo estás haciendo otra vez, perdónate y recuerda que haz hecho una nueva elección.
Afirma diariamente que te amas a tí mismo(a). Si al principio te parece difícil, comienza por decir: “Estoy aprendiendo a amarme y aceptarme a mí mismo(a) tal cual soy”. Cada vez que pases frente a un espejo, sonríete y mándale amor a tu imagen.
La autoaceptación es una extensión de la energía del amor a uno(a) mismo(a), y es igual de importante en tu campo energético personal. Mucha gente pasa la mayor parte del tiempo juzgándose y criticándose, sin darse cuenta que con esa actitud están negando su propia fuerza de vida. No se aceptan a ellos mismos y luego se preguntan por qué no logran conseguir lo que quieren. Por lo tanto, debemos cambiar nuestros pensamientos y comportamientos que reflejen el autojuicio y la autocrítica. Además de hacernos infelices, el no aceptarnos a nosotros mismos afecta negativamente nuestra atracción magnética. Por el contrario, la autoaceptación incondicional nos trae la aceptación del Universo y de los demás.
Cuando te encuentres criticándote a tí mismo(a), pregúntate: ¿Es ésta realmente la clase de energía que quiero que me represente en el Universo? No tienes que ser diferente para merecer tu propio amor y aceptación. Respira profundamente, muévete y cambia ese pensamiento. Deja de ser perfeccionista y aprende a perdonarte a tí mismo(a) por tus errores. Elige reconocer tu valor y apreciarte por quien eres. Entre más te aprecies a tí mismo(a), más te apreciarán los demás.
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por gerundio Hoy a las 13:00
