No hay necesidad de imitar las conductas de otras personas, ¿quieres ser como tu amigo? Si nos hubieran creado para ser todos iguales, entonces todos seriamos una copia. Todavía no se puede, aparentemente, clonar a los seres humanos. ¿Por qué tenemos que ser iguales a otros? Cada persona tiene su propia personalidad. No somos duplicados de nadie.
En lugar de copiar un modelo que ya existe, lo mejor es crear tu propia identidad. ¿Por qué? Tú necesitas tener tus propios gustos y observar cuáles son tus propias necesidades emocionales. ¿Por qué te preocupa ser alguien diferente?
Se puede aprender de otras personas, pero no imitarlos. Conoce sus habilidades, pero adáptalas a tu propia vida para que puedas avanzar. Tú estas tratando de caminar tu propio sendero, no puedes seguir los pasos de alguien más, eso te hace perder tu propia identidad. Las otras personas tienen su propio camino marcado con sus conductas.
¿Por qué las personas tenemos las huellas digitales diferentes?, no hay ninguna que sea idéntica o parecida a la de otro sujeto. Nuestro cuerpo es distinto, ¿Por qué queremos por medio de las cirugías plásticas parecernos a otra persona? ¿Por qué no ser feliz con la forma de ser? Esto no se refiere a la simple apariencia física, sino a los talentos y habilidades que cada uno tiene en particular. Todo el mundo es un ser único e irrepetible. Mientras se está anhelando tener el talento de otro, se descuida y no se perfecciona el talento propio. Esto puede ser contraproducente para el propio crecimiento personal. Te han dotado de un conjunto único de talentos, y por esa razón, tienes que aprender a incrementarlos y desarrollarlos en tu propio beneficio.
No es una coincidencia. Todo el universo existe por una razón. Los talentos no son un simple accidente, sino que tienen una causa para que estén allí. Tampoco es casual que si quieres cantar con una voz especial, no la tengas, quizás tengas otro talento que no has descubierto y puede motivarte a hacer cosas maravillosas.
Otro hecho que es indiscutible, es que todas las personas tienen un talento único. No te equivoques! Los talentos no son solo desempeñarse dentro del canto, actuación, pintura, escribir o ser un excelente deportista. Tu talento puede ser una persona espontánea, transmitir entusiasmo a los demás, te puedes conectar con las personas, ser generoso, ser un buen profesor o conferencista, ser parte fundamental dentro de una comunidad, o saber solucionar los problemas de los demás. También puede ser inteligente, irradiar tranquilidad y amor a los demás, tu bondad, ternura. La lista puede ser interminable y larga…
Lo importante es ser uno mismo ¿es verdad? Para ser uno mismo, hay que averiguar cuáles son esos talentos. Y me dirás: ¿Cómo lo averiguo? Observándote cuales son las cosas que te gustan realizar o que otras cosas harías, pero algunas son espontáneas, y no lo vemos como si fueran talentos, porque cada persona lo aprecia como algo común, y no es así, los valores personales, no son comunes. Son de cada persona en particular. En la sinergia y la alineación de estos talentos, radica la clave para la belleza emocional.
Sería una gran pérdida de tiempo tratar de ser alguien que no eres, para asemejarte a otra persona que idealizas. Trata de dar lo mejor de ti mismo, y verás cuantos talentos tienes sin descubrir. Cuanto más te atrevas a ser tú mismo, más libertad sentirás en tu corazón. Asume que eres una persona libre, y ésta libertad, te hará resurgir tu ser interior que está esperando que le permitas darse a conocer en su plenitud. Vive tu vida celebrando cada momento de felicidad que pasas, apreciando tus talentos innatos.
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