Construir tu Visión

Nuestro cerebro no distingue la ficción de la realidad, e intervienen los mismos procesos neuronales cuando imaginas el futuro que cuando ves tu propio presente, es por lo que realizar el ejercicio de visión pone en marcha nuevas conexiones neuronales que permiten hacer del futuro una realidad.

La visión en si misma no cambia nada de nuestra realidad actual, sin embargo va transformando la manera de ver el presente, la manera de percibir y poner el foco en lo que hacemos.

La visión se acerca a nuestros sueños de manera imaginativa, y la imaginación, es decir, las imagenes puestas en marcha, hacen trabajar al cerebro límbico de una forma más emocional. La visión nos pone en camino, la visión nos pone en acción, desafiando el pasado.

La visión si es recurrente, hace que nuestro cerebro consciente e inconsciente capte claramente en que dirección vamos, hacia donde vamos a poner toda nuestra energía, la visión ,es más que una buena idea.

La visión puede empezar con una declaración de compromiso, y así ir construyendo una imagen que nos vaya comprometiendo, la declaración la vamos realizando junto a la visión con el diálogo con las personas.

La imagen del futuro es lo primero, luego ya veremos como nuestro cerebro creativo pone en marcha todos los medios necesarios para hacerla realidad.

Podemos tambien crear una visión compartida con más personas, que implique a nuestro equipo, o al equipo de la empresa que ha de llevar a la organización a un futuro más esperanzador. El equipo a de participar en la construcción de la visión para que este de acuerdo y darle el soporte y empuje necesario.

La visión ha de formularse en positivo, con ilusión, que movilice al musculo de la pasión, para que inspire todas las acciones futuras. La visión a de estar concretada con fechas, personas, lugares etc. Si la acción esta conectada con la visión de futuro, cobra sentido y nos impulsa con mayor entusiasmo y aliento hacia un futuro que se haga realidad.

Poner el foco en lo que queremos y en lo que creemos, es preparar el escenario para que esto que queremos ocurra. Poner el objetivo en lo que queremos y no en lo que no queremos. Lo que no queremos parte de una concepción negativa de la vida, lo que queremos moviliza nuestra área emocional que nos impulsa con mayor fortaleza hacia el estado que queremos alcanzar.

Cuando ponemos el foco en lo que queremos, estamos fomentando la sincronicidad con nuestro mundo y con todo lo que sucede a nuestro alrededor y por lo tanto poniendo las bases de la transformación que buscamos.

Si nuestra visión está alineada con nuestra escala de valores, todo comenzará a fluir de manera automática e inconsciente, pues lo que queremos esta en sintonia y en consonancia con lo que realmente queremos en nuestra vida y a lo que más damos valor, en definitiva lo que nos mueve en lo más adentro de nuestro ser

Preguntas para Tu Visión

el método Socrático de la mayeutica, que consiste en preguntar y preguntar hasta encontrar la respuesta adecuada que permanece dormida en nuestro interior, es decir, encontrar nuestra mejor solución. Las preguntas como decia en anteriores artículos, tienen el poder de seguir interpelando nuestra mente inconsciente, de manera que quedan flotando en nuestro interior y su eco perdura hastra cuando dormimos.

Sería algo así como si en terminos informáticos, pusieramos en marcha un buscador, escribieramos nuestra visión, y formularámos las búsquedas adecuadas para que nuestro tremendo procesador central, que es el cerebro, unido a su subconsciente en su almacen de experiencias y conocimiento, fuera de manera inteligentísima poniendo en marcha los millones de neuronas y células para encontrar la sabía decisión que anida en nuestro interior dormida, esperando que la despertemos.

Algunas preguntas que nos pueden guiar son:

¿Qué es lo que quieres?

¿Cómo describirias tu situación ideal?

¿Cómo te ves si ya estuvieras donde quieres estar? ¿Cómo te sientes en ese futuro?

¿Qué has tenido que hacer para estar allí? ¿Qué elecciones tuviste que hacer? ¿A que he tenido que renunciar? ¿Que ganas y que pierdes al final de tu visión?

¿Cual es el balance final?


Germán Belda Gil