Cómo sacar Provecho del Cambio

La gran mayoría de las personas solemos evitar enfrentarnos a situaciones difíciles, porque nos hacen sufrir. Sin embargo, obviamos que ante la adversidad es cuando nos desarrollamos más y mejor. Lo cual no significa que debamos provocar situaciones desagradables ni buscar problemas innecesarios. Si bien, hay personas que por algún motivo siempre están metiéndose en líos, arriesgando en negocios o cambiando de entorno. De alguna forma tienen la necesidad de sentir ciertas emociones que le ayudan a mejorar y desarrollarse personal y profesionalmente. Sin embargo, todo eso no está bien visto socialmente. Con esto no quiero decir que tengamos que abandonar nuestra vida actual y lanzarnos a la aventura sin sopesar las consecuencias de dejar atrás la forma en que vivimos actualmente. Lo que si digo es que si seguimos haciendo las cosas como siempre seguiremos obteniendo los resultados de siempre, puesto que nada diferente va a ocurrir y por tanto nada distinto vamos a aprender. Si quieres tener ciertas cosas en el futuro, bien sea seguridad económica, más tiempo libre, mejores relaciones o reconocimiento social tendrás que empezar a hacer cosas diferentes a las que hoy haces y convertirte en alguien diferente a quien hoy eres.

En contra de lo que creemos, y a pesar de las resistencias que ponemos, las personas tenemos una increíble capacidad de adaptación al cambio. Si no fuera así la especie humana ya se habría extinguido. Lo que ocurre es que, como consecuencia de ello, nuestra capacidad de acomodarnos también es muy grande. Así, poco a poco nos vamos acostumbrando a vivir con menos de todo: menos tiempo para estar con los amigos, con la familia y para dedicárnoslo a nosotr@s mism@s o a nuestros hobbies; menos dinero para llegar a fin de mes, para comprar las cosas que queremos, para viajar, para disfrutar de nuestro ocio; menos reconocimiento por lo que hacemos en el trabajo, por nuestro esfuerzo con la casa y la familia, y por ello menos autoestima; menos oportunidades para progresar, menos sueños que perseguir, incluso menos salud que mantener. Llegamos incluso a pensar que la vida es así, que es mejor conformarse antes que frustrarse por perseguir metas inalcanzables. ¿Conoces a alguien en esta situación?

Sin embargo, si evitamos enfrentarnos al cambio por miedo al fracaso o al rechazo o al ridículo, nos estamos perdiendo la oportunidad de sentir ilusión y confiar en las posibilidades que nos ofrece la vida y en nuestras propias capacidades para superarnos y solventar los problemas. Si no atravesamos momentos de angustia y de dolor nos estamos negando sentir instantes de gratitud por todo lo que tenemos y los pequeños detalles con nos hacen agradable la existencia. Cuando nos llenamos de valor y enfrentamos con actitud positiva y ganas de aprender todo lo que nos ocurre, nos exponemos a un montón de emociones contradictorias, desde ansiedad hasta curiosidad, pasando por tristeza, alegría, agobio, expectación, tensión, motivación, duda… para llegar a sentir satisfacción y orgullo. Todo esto es consecuencia de nuestra expansión como personas y eleva nuestro nivel de desarrollo. ¿Qué estás dispuest@ a hacer por tu propio desarrollo?

http://www.coca-cola.tv/20/envivo/congreso-de-la-felicidad-2010/086932/alejandra-vallejo-najera-espanol