Siempre que hablamos de amor, parece que hablamos del amor de pareja. Sin embargo, existen muchos tipos de afectos diferentes y todos ellos, son importantes. De hecho, la mayor declaración que debes hacer cada mañana es hacia ti mismo para cultivar tu autoestima y tener un buen nivel de estabilidad emocional.
Por supuesto, también debes dar las gracias a la vida por todo aquello que te ofrece y por ser partícipe del milagro de la existencia. Aquellas personas que son creyentes también viven de cerca la fe y el vínculo relacional con Dios. Es importante aprender a decir “te quiero” a aquellos que te rodean y que forman parte de tu vida. Algunas personas después de casarse y tener hijos, reducen su círculo social a la familia.
Sin embargo, debes seguir cultivando tus amistades y tu propio espacio para poder ser tú mismo y realizarte en todos los niveles. El ser humano tiene una identidad propia. El amor y la amistad son mucho más frágiles de lo que parece a simple vista. Es decir, los vínculos se renuevan cada cierto tiempo para poder seguir vivos. De lo contrario, ante la falta de detalles, surge la distancia y la indiferencia.
Por ello, en el amor no basta con hacer una primera declaración al principio de la relación. Muchas personas tienen el pudor de expresar sus sentimientos, sin embargo, debes sentirte libre a la hora de mostrar el cariño de forma asertiva a través de mensajes agradables y sinceros. Por ejemplo: “Me alegro de que tú formes parte de mi vida”, “te admiro por ser como eres”, “eres una persona especial para mí”, “no imagino mi vida sin ti”, “te quiero mucho”…
Cada persona debe de expresar su mensaje con sus propias palabras. También se debe mostrar el amor a lo hijos. De hecho, los niños se sienten protegidos al extremo por sus padres. El hecho de sufrir carencias afectivas en la niñez puede dejar grandes heridas y causar mucho malestar y sufrimiento. Comparte tiempo con tus hijos, sé cercano, haz planes en común, preocúpate por sus estudios, habla con ellos…
Los padres son un pilar y un soporte emocional clave a lo largo de toda la vida. Por ello, cada noche puedes decirle a tu hijo que le quieres. No hay mejor forma de despedir el día. Por supuesto, a los amigos también se les quiere. Pero a veces, en medio del trabajo, las prisas y las ocupaciones, muchas personas descuidan los planes con los amigos y el cariño.
Por ello, intenta conservar esas amistades que de verdad son claves en tu vida. Recuerda los cumpleaños de aquellos que quieres, felicítales la Navidad, llámales por teléfono, toma la iniciativa a la hora de organizar planes.
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