Espíritu Santo, concédeme hoy Tu libertad,
sólo por hoy, concédeme Tu paz y Tu gozo,
para retirar con ello a toda aparente circunstancia
el poder de influir sobre mí.
Mi amada Luz, no dejes que el sufrimiento
se pose hoy en mi mente,
no me permitas más compañía que la Tuya,
ayúdame a recordar Quién soy y Cuál es mi herencia.
No permitas que mi mente divague,
disuelve por igual distracciones y juicios,
pues no poseo otro anhelo que el de descansar en Ti.
Te ofrezco cada uno de los sustitutos que en el pasado inventé,
en Tus manos deposito todo deseo insensato,
que mantiene a mi corazón atrapado en esta prisión.
A Ti Te entrego segura cada uno de mis temores,
y los resentimientos que nublan mi mente,
sabiendo que Tú corregirás en el origen
cualquier error de apreciación.
Mi Sublime Presencia, mi leal Compañero,
sin Ti estaría perdida, condenada a transitar sin rumbo
por mundos de odio y venganza.
¿Qué sería de mí sin Tu promesa,
qué sería sin la esperanza de despertar
a la realidad inmutable de mi Padre?
Espíritu Santo, eleva hoy mi conciencia hasta el Amor,
y sujétame fuerte para que no me caiga.
Que el Amor sea hoy mi inspiración, mi fortaleza y mi protección,
el aliento que me da la vida y el alimento que la nutre.
Que pueda verLo en cada fracción de segundo de este día,
en cada soplo de viento, en todo ser viviente
y a través de todo acontecimiento.
Permíteme ser hoy testigo y reflejo de Tu Amor,
permítele a mi mente ir más allá de toda ilusión,
ayúdame a reconocer la Voluntad de mi Padre.
Tu paz y Tu Amor son mi única ambición,
haz que sean míos sólo por hoy...
… PORQUE SÓLO POR HOY, QUIERO SER COMO TÚ
Por Anna Horno