Un árbol muy relacionado con la mitología y con la religión católica es la higuera. Es uno de los primeros árboles que se nombra en la biblia y bajo el cual la loba amamantó a Rómulo y a Remo.
La higuera es símbolo de fecundidad y con sus hojas se pueden hacer rituales para devolver esa capacidad a los hombres. Del mismo modo se utiliza para una mujer que no tiene suficiente leche para amantar a sus hijos.
Está vinculado a la meditación de Buda, por lo que bajo sus ramas se puede alcanzar la serenidad necesaria para la reflexión. En los sueños, la higuera es símbolo de abundancia cuando se la ve llena de vida, pero si está seca indica lo contrario. Soñar sólo con los higos es indicador de preocupaciones.
Entre sus cualidades curativas, se dice que la sabia de la higuera quita las verrugas y los callos.
Para el horóscopo celta, los nacidos entre el 14 y el 23 de junio o el 12 al 21 de diciembre están bajo la influencia de la higuera.
Los nacidos bajo las influencias de la higuera son fieles y sentimentales, les gusta estar en familia y con amigos. Son fieles a sus convicciones y planean bien sus objetivos para lograrlos con tranquilidad.
Les gusta la tranquilidad y estar poco atareados ya que sus nervios se alteran con facilidad. Los nacidos hasta el 21 de junio son un poco egocéntricos y suelen tener muchas conquistas. Los nacidos después de esa fecha, son tiernos y caprichosos, suelen destacarse en las artes.
Los nacidos en diciembre tienen como mayor cualidad el deseo de hacer felices a los otros, por lo general son maestros de niños pequeños.