Estas gemas del grupo del cuarzo simbolizan la fidelidad y constancia, y dotan a su portador de equilibrio emotivo y paciencia; disminuyen la ansiedad, depresión y estados de nerviosismo, y son muy eficaces a la hora de rechazar las energias negativas que intentan atacarnos.
Quizá la más curiosa propiedad de estas piedras es su capacidad de absorber radiaciones electromagnéticas de ordenadores, televisores, teléfonos móviles; basta con colocar una piedra de este tipo sobre el aparato, y recordar limpiarla de tanto en tanto.
El cuarzo turmalinado facilita la apertura de los chakras basal, del plexo solar y del entrecejo, y posee afinidad con los signos del Zodiaco de Cáncer, Leo, Virgo, Sagitario y Acuario.