Supuestas apariciones fantasmales, agresiones de entes visibles y voces de origen desconocido son algunos de los fenómenos a los que los trabajadores del metro de Moscú se enfrentan a diario. La situación ha llegado a tal extremo que incluso ha provocado la convocatoria de una rueda de prensa por parte del máximo responsable de transportes de la capital rusa, Dimitri Gayev, para desmentir los sucesos. “Todo son cuentos de miedo”, ha asegurado. Asimismo, ha explicado que durante los 18 años que lleva trabajando en el metro nunca ha vivido un suceso paranormal. Sin embargo, no son pocos los que creen que los fenómenos son reales y que el Gobierno trata de ocultarlos.