Las 11 dimensionesSiguiendo con nuestras entregas relacionadas con la Relatividad, en esta queremos presentar a nuestros lectores una historia de amor que se desarrollaba tranquilamente en un mundo de dos dimensiones físicas, la cual de pronto se vio empujada a nuevos horizontes, por la presencia de una puerta a un mundo de mas dimensiones.
El amorEn ese mundo, un pretendiente visitaba a su novia a escondidas de los padres de ella, al igual que en el nuestro. Ese mundo podía ser tan grande como queramos, pero era plano, no tenía ni arriba, ni abajo y el novio se deslizaba de espaldas sobre la superficie para alcanzar a su chica y así eran felices.
Cuando el padre de ella se dio cuenta de la existencia de ese noviazgo que no le gustaba, encerró al pretendiente de su amada hija y puesto que en ese mundo no había ni arriba ni abajo, le bastó dibujar un rectángulo alrededor del galán y se fue tranquilo, pues para el no había caminos para salir en ese mundo plano y las 4 líneas dibujadas eran suficiente impedimento. Lo que el no sabía, era que el chico era un físico de alto nivel, se llamaba Einsten.
Sus estudios le habían llevado a figurar otros universos en su tiempo y se dedicó a estudiar como salir de esa prisión para ir a visitar a su novia.
Cuando encontró la solución de cómo usar otra dimensión para sus fines, lo hizo y desapareció del plano de su mundo, pues "entendió" que había arriba y se despegó, es decir se elevo. La felicidad de los protagonistas de esa nueva versión de Romeo y Julieta quedo escrita en ese maravilloso mundo, en el cual la ciencia ayudaba a los seres a ser felices, pues les permitía estar juntos.
El errorLuego de su romántica visita, le tocaba regresar a su cárcel para que nadie se de cuenta y para que no castiguen a su novia, mas o descuido, si bien en su mundo plano de dos dimensiones le era imposible darse una vuelta y ponerse boca a bajo, pues no era posible despegarse de la superficie, al encontrar la puerta de la tercera dimensión, nuestro mundo, eso era lo mas normal y sin darse cuenta se dio la vuelta y su corazón se puso al otro lado, durante su viaje de retorno y cuando descendió en su mundo original se dio cuenta del error cometido, pero ya fue muy tarde, pues pronto descubrieron que su corazón estaba en el lado errado.
No sabemos que fin tuvo la historia, pero confiamos que la nueva física que descubrieron les haya cambiado la forma de pensar, de la misma manera que confiamos que esa pareja haya sido feliz hasta el fin de sus días, en vez de transformarse en otro episodio de Romeo y Julieta, pero el ejemplo nos muestra un posible accidente en ese mundo de dos dimensiones, si de pronto se encontrara una puerta a una dimensión adicional.
Nuestro mundoPara nosotros, la ciencia nos dice que inclusive a lo mejor vivimos en un mundo de 11 dimensiones, pero que las otras se hallan "enrolladas" en anillos y no las podemos apreciar, pues serían muy pequeños.
La analogía con la cual se compara para dar una explicación es la de una manguera. Vista desde muy lejos, o por seres muy grandes, la manguera parecería ser solo una línea curva, sin ningún espesor "medible", pero vista de cerca, se ve que en los extremos hay bocas en forma de circunferencias, lo mismo que dimensiones "enrrolladas".
Lo mismo pasaría en nuestro mundo, solo que en analogía a esas "bocas", nosotros tendríamos 7 dimensiones enrolladas, infinitamente pequeñas, que quedaron así en el inicio, cerca del tiempo t = 0, esto es antes del Big Bang y que lamentablemente no nos permitirán escapar, como sucedió con el héroe de nuestra historia.
No sabemos si será posible que algún día se puedan llevar a cabo experimentos que demuestren su existencia; por ahora no lo sabemos, pero el futuro, tal vez tenga muchas sorpresas, para aquellos felices humanos que logren ver esos descubrimientos.
Fuente:
www.elmistico.com.ar