Andrew Matthews, famoso escritor de autoayuda nos dice lo siguiente sobre el poder magnético de nuestra mente...
Tu mente es un imán y atraes aquello en lo que piensas. Los mismos principios de magnetismo y atracción que se presentan en el mundo «físico» operan en el plano invisible. Todas las personas con éxito conocen los principios acerca de las leyes de atracción y el milagro de la mente. Las personas infelices no creen que estos principios puedan servirles para beneficio personal. ¡Preferí escuchar a los individuos felices!
No puede decirse que los pensamientos son «nada», porque en realidad los pensamientos son «algo». Para que puedas pensarlo, tiene que existir. ¡Tiene que ser una cosa! Y como es una «cosa» con energía propia, un pensamiento necesariamente tiene que estar sujeto a las leyes y principios como todo lo demás que existe en el planeta.
Si se analiza desde esta perspectiva, resulta más fácil reconocer que la ley de atracción es tan real y poderosa como la gravedad y la electricidad.
El ejercicio del poder mental no es un sustituto de la acción. Más bien, el adecuado uso de la mente te permitirá lograr tus metas mucho más rápido y fácilmente que de otro modo.
Tu mente es un magneto. Piensa en lo que deseas, y lo conseguirás. Imagina que tus pensamientos son nubes invisibles que se levantan para acumular resultados. Disciplinando tus pensamientos determinas los resultados que obtendrás.
Como las cosas que más amamos y las que más tememos tienden a ocupar nuestros pensamientos gran parte del tiempo, atraemos justamente esas cosas. Incluso si pensamos que no queremos que pase equis cosa, gravitaremos justamente hacia eso. Nuestra mente no puede desplazarse en sentido negativo con respecto a las cosas; no puede más que moverse hacia ellas.
Si no paramos de comentar, pensar y leer acerca de «cosas malas», gravitaremos subconscientemente, o aun conscientemente, hacia ellas. La gente exitosa se desplaza hacia el éxito. Los fracasados tratan de escapar del fracaso. El más importante principio mental que puede transformar a los perdedores en triunfadores es «concentrarse en lo que uno quiere».
La mayoría de la gente se tambalea por la vida quejándose de lo que carece y hablando de lo que quiere evitar. Ese es un callejón sin salida. Tenemos que concentrarnos en lo que queremos.
Cuando tememos perder algo, nos colocamos en posición de perderlo. Cuando tememos perder el amor de alguien, de inmediato nos ponemos en peligro de perderlo. Concéntrate en lo que tienes y disfrútalo. No pienses en perder lo que posees.
Enfoca tu atención en lo que deseas. Si dejas que tus temores te obsesionen, éstos te abrumarán. El principio de atraer lo que se teme es hermoso. Implica el reto de enfrentar nuestros miedos y, mediante ello, superarnos. ¿Cómo podemos evolucionar si las cosas que tememos se alejan de nosotros? ¿Cómo desarrollarnos si nunca enfrentamos lo que nos atemoriza?
En cuanto al temor de perder algo, las leyes universales nos instan a mantenernos firmes. Si pensamos que cierta pérdida nos arruinaría la vida, y nos obsesionamos con esta idea, ¡quizá las leyes universales nos demuestren que podemos vivir perfectamente sin aquello que tanto tememos perder!. Debemos disfrutar lo que tenemos y vivir el presente. Temer pérdidas no es vivir en el presente. Temer pérdidas es vivir en el futuro.
Cuando finalmente desarrollamos el valor necesario para enfrentar un problema, con frecuencia, éste desaparece. Naturalmente, las cosas no siempre se presentan de esta manera, y en ocasiones es necesario enfrentar la situación con todas sus consecuencias. ¿Cuántas veces has notado que pensar en alguna actividad es mucho más doloroso que realmente llevarla a cabo?
http://www.zonantra.com/2011/01/tu-mente-es-un-iman-y-atraes-aquello-en.html