Para evitar los bloqueos mentales, no hay mejor forma que conocerlos, estudiarlos y ponerles soluciones
Los bloqueos mentales pueden presentarse como obstáculos (crees que no puedes hacerlo), impedimento (algo te impide hacerlo), negación (crees que no vale la pena hacerlo), temor (a hacerlo a tiempo o perfecto), experiencia negativa (sombras del pasado) o interrupción (tienes otras distracciones).
Pero sea cual sea la causa, lo importante es poner solución buscando estímulos que eliminen esa sensación de “estoy buscando una aguja en un pajar”
Algunas propuestas:
Cambiar de escenario: busca un nuevo ambiente, levántate a por una taza de café o sal a pasear un rato.
Trabaja y descansa: cada persona es un mundo y por ello es importante que conozcas tu capacidad de concentración y aprendas a controlarla para determinar tus intervalos de trabajo/descanso.
No dejes de buscar la solución de un problema: recuerda que la mejor solución no tiene porque ser la primera que se te pase por la cabeza. Piensa, estudia y compara.
Rodea los obstáculos: cuando llegas al punto de “no sé como continuar” no eches el freno y evita la desmotivación continuando el resto de temas a tratar, seguro que por el camino se te ocurre una buena forma de retomarlo.
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por gerundio Ayer a las 11:56
